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Hoy conocemos a Alberto González, concejal del distrito Latina

Hoy conocemos a Alberto González, concejal del distrito Latina

“Madrid me ha dado mucho y espero devolvérselo con trabajo, ilusión y acierto”

Para Alberto González, ser concejal presidente del Distrito de Latina es cumplir la ilusión de aportar su vocación de servicio público para mejorar barrios como Aluche, al que este “madrileño de Mijares (Ávila)” –como le gusta definirse- llegó de adolescente para estudiar en el IES María de Molina del Distrito.

Su implicación con el Partido Popular se materializó a través de Nuevas Generaciones, de las que llegó a ser presidente de NN.GG de Latina y, también, en asociaciones universitarias. Fue compaginando estas actividades con pequeños trabajos en la hostelería y ayudando en el negocio familiar. Su compromiso con Latina se afianzó en esos inicios gracias a su labor como asesor técnico en la Junta Municipal, recorriendo cada palmo de barrios y colonias. Después, completó su formación en la Escuela Internacional de Protocolo y trabajó en la Alcaldía con Alberto Ruiz Gallardón y Ana Botella, lo que le dio una visión aún más global de lo mucho que se puede hacer desde el Ayuntamiento.

 

 

Tras unos años en la empresa privada, se reincorporó a la gestión pública en la Comunidad de Madrid, donde ejerció como director general de Autónomos y Emprendimiento tras la pandemia por Covid-19, una experiencia que le demostró la importancia de adoptar y desarrollar políticas que faciliten, sin trabas burocráticas innecesarias, la actividad económica de quien quiera vivir y trabajar en la región capital de España. Además, ha compaginado siempre el trabajo con la dedicación al Partido Popular, ahora como presidente de la sede del Distrito de Latina y como Secretario regional de Distritos en la Dirección Regional.

Aunque mantiene el vínculo con su pueblo, Madrid es la ciudad de su vida, apasionado de su historia, de sus personajes y de sus rincones. Es fan de sus sobrinos y de Joaquín Sabina, de las cañas con amigos en bares de toda la vida (mejor si es con una tapa de boquerones y aceitunas) y del Atleti, aunque echa de menos el Calderón. Madrid, dice, le ha dado mucho y espera devolverlo con trabajo, ilusión y acierto.